miércoles, 28 de diciembre de 2011

Sobre necios y tontos

Necios y tontos aquellos (pocos, por suerte) que se regocijan con los contratiempos del otro.
Yo siempre preferí alegrarme de las victorias propias y no festejar las desgracias ajenas, porque es de una mezquindad y falta de ideales importante el reírse de lo malo que le pasa al vecino.

Necios y tontos los que sonríen ante lo que a millones les duele.

Los "viva el cáncer" de siempre. Los del siglo pasado, esos del 50, y los del nuevo milenio, los del 2010 y 2011, porque apoyan su amor en el odio, en la resta, en los restos. Y así, muchachos... así no se construye, nunca se construyó ni nunca se va a construir nada.

Los que se relamen de gusto y expectativa, acompañados del aplauso de aquellos otros que se creen iguales a ellos. Con la diferencia de que los primeros usan a los segundos y los segundos ni cuenta se dan. Eso hace a los segundos aún más necios y más tontos todavía.
Carne de cañón feliz.
Levantacopas en un brindis al que nunca fueron ni serán invitados, aunque les hagan creer que sí.

Son muy necios y muy tontos aquellos que piensan aunque sea por un segundo que si no está Cristina esto tiene vuelta atrás.

Los que piensan que la Presidenta es la única que sostiene este proyecto. Entérense: somos millones (literalmente)  los que hacemos realidad este día a día que cada vez es un poquito mejor para todos y todas, aún para los necios y los tontos. Aunque por supuesto, como son necios y tontos no lo van ni a comprender ni a admitir.
Aunque viajen a la costa cada fin de semana largo que exista.
O se quejen por el precio del pan lactal pero aún así lo compren porque saben que cuando llegan a la caja lo pueden pagar.
O se indignen por los jubilados mientras van a visitar a sus viejos, que ahora tienen dos aumentos por año y un gran porcentaje de sus medicamentos cubiertos. Aunque sus viejos no hayan aportado los años suficientes y aún así hayan podido conseguir su jubilación.

Necios y tontos aquellos pocos que brindan de antemano y en vano. Porque acá no se fue nadie, y déjenme que les diga algo: acá no se va a ir nadie.

Necios, tontos, arrogantes, básicos, miserables, idiotas, fáciles de leer, predecibles, inofensivos, pobres de toda pobreza.
Jugando a ser insultantes sin poder realmente insultar a nadie.
Jugando a ser el más malo de la cuadra cuando saben que no llegan ni a la mitad.
Jugando a ser cínicos con los pañales puestos, por las dudas, no vaya a ser cosa.
Como los "viva el cáncer" de Evita.
Como los "viva el infarto" de Néstor.
Tantas décadas pasaron y siguen siendo los mismos. Y, créase o no, con los mismos pañales.
Hay cosas que no cambian. Hay pañales que no se cambian. Quizás sea por eso que siguen con la misma mierda de nenes de hace años.

No festejen ni se alegren, señores festejadores de la muerte. Que para empezar son una abrumadora minoría. Y para seguir, esta abrumadora mayoría no les va a dar el gusto.
Hay Cristina para rato, hay proyecto para rato, mis queridos "viva el cáncer".
Esperen a que su equipo salga campeón para saltar por algo.
Por lo menos eso valdría la pena.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

CUANTO ODIO QUE TENES!!
NADIE TIENE LA CULPA QUE CRISTINA TENGA CANCER...SOS MUY EGOISTA,HABLAS DE PROYECTOS POLITICOS EN UN DIA DE PROFUNDO DOLOR...MATERIALISTA.INSENSISBLE,FRIO,CALCULADOR...LA PRESIDENTA ESTA GRAVE Y VOS COMO SI NADA,PELOTUDO!!

Tuqui dijo...

Así que yo soy el que tengo odio.
Ok, quedamos así, señor troll.

EDGARDO dijo...

ANDA VOS Y KRETINA A LA RECHONCHA DE TU MADRE PUTA Y COMUNISTA, INFAME TRAIDOR A LA NACION ARGENTINA.

Tuqui dijo...

Viejo, ¿con qué se dan?