viernes, 4 de diciembre de 2009

Marcos Aguinis: cómo cambia la gente...?


Leyendo en internet, me encontré con una nota hecha al periodista Marcos Aguinis en Mayo de 2009. Y para mi sorpresa, en esa nota decía lo siguiente: en los setenta fue un autor frecuente para el progresismo local, fue prohibido y perseguido y aportó a la recuperación democrática con la palabra. Luego de leer eso, me fui a buscar más información de este periodista, y encontré que fue Subsecretario y luego Secretario de Cultura de la Nación en el gobierno de Alfonsín. Creó el Programa Nacional de Democratización de la Cultura y puso en marcha acciones para el mejoramiento de los mecanismos participativos de la sociedad. Por su obra fue nominado al Premio Educación para la Paz de la UNESCO. Un currículum bastante interesante que no le conocía, la verdad. Y es por eso que no puedo entender cómo es que una persona que hizo las cosas que nombré anteriormente, pueda llegar a esto (escribo unos extractos, los que más me llamaron la atención):

Periodista: Occidente respeta la propiedad privada del capital concentrado, empeñado en sostener un modelo de derrame que fracasó. Al menos eso indican los 1.200 millones de pobres en el mundo.
Aguinis: Que en Estados Unidos se viola la propiedad privada, es cierto, que hay trampas financieras también, pero hay ciertas leyes que en última instancia te defienden. Pero no hablemos de Estados Unidos, que es una potencia conflictiva para nuestra sociedad, hablemos de Nueva Zelanda, hablemos de Australia.
P: Habla como si en la Argentina rigiera el comunismo. ¿En qué aspecto no se respeta la propiedad privada?
A: Al sector agroindustrial, que es el más pujante del país, se le ha pretendido quitar gran parte de la ganancia a través de las retenciones. Se dijo que se iba a utilizar en hospitales y escuelas. Era mentira, se iba a utilizar en la caja destinada a sostener el poder del que gobierna.
P: Esa caja, como usted dice, también sostiene un tipo de cambio alto que beneficia los ingresos de las commodities agrícolas. Y para seguir con su línea de pensamiento: en tal caso las retenciones al agro serían una forma de compensar una violación a la propiedad privada anterior, que fue la confiscación del poder adquisitivo de los salarios vía devaluación.
A: Eso no es así. El precio de las commodities crecieron por demanda internacional, y la rentabilidad creció por las inversiones agroindustriales. Inversiones previas, porque el Gobierno se encargó de espantar las inversiones extranjeras, que necesitan ser controladas, es cierto, pero no expulsadas.
P: Descarto que está en contra de las retenciones...
A: Si no hubiese retenciones, y si hubiese estímulos a la agroindustria, la Argentina podría repetir el fenómeno de la Segunda Guerra, porque hoy el mundo está hambriento y necesita alimentos.
P: En aquella Argentina de posguerra se comía pan negro porque se exportaba toda la producción...
Al preguntarle su opinión sobre las AFJP, esto fue lo que pasó...
A: Eso fue una confiscación porque fue ir en contra de una decisión que tomó el ciudadano argentino al ver que la jubilación estatal fue el lugar donde todos los gobiernos siempre metieron la mano en la lata. Ahora, las AFJP no funcionan bien por sí mismas, deben ser reguladas. Por eso funcionan bien en Chile...
P: No es cierto, en Chile el sistema está colapsado y el Estado debió rescatar a los jubilados estafados por el sistema privado. Algo similar ocurre en Estados Unidos con los sistemas de seguro de retiro, con compañías quebradas por la especulación financiera.
A: Bueno, no conocía eso...
P: En su libro es muy duro con los piquetes sociales, pero no menciona a los piquetes chacareros. ¿Tiene valoraciones distintas de ambos?
A: No, ambos son criticables, y lamento no haberlo puesto en el libro...
P: Hebe de Bonafini observó que en esa manifestación (un foro que se había reunido en la Legislatura porteña) no había ningún pobre.
A: Bueno, es que a los pobres se los lleva con choripanes..
P: Aguinis, se supone que los intelectuales deberían evitar los lugares comunes...
En los ochenta fue un autor requerido por los lectores progresistas y hoy lo invitan para hablarle a la derecha. ¿Se derechizó?
A:
Al contrario, sigo defendiendo los valores de la izquierda...

La entrevista sigue, pero ahí fue donde dejé de leer. Cómo se puede hablar con tanta propiedad de un tema que "no se conoce", por ejemplo? Cómo se puede decir que defiende los valores de izquierda y hablar como una persona de derecha? Cómo se puede decir que defiende los valores de izquierda y ser un periodista respetado por gente como Grondona, Macri, Carrió y tantos otros que representan, para mí, a la derecha más recalcitrante que existe en Argentina hoy por hoy? Cómo se puede pasar se ser un periodista reconocido como "progresista" a... esto que es ahora Marcos Aguinis?

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